Te espero…

Estoy sentada sobre una lona en mi terraza junto a la claraboya, recordándote mientras siento cómo la fresca brisa me recorre por completo… Con una sonrisa y la mirada perdida en el cielo nocturno, tus palabras vienen una y otra vez a mi mente, esas dulces, cálidas e intensas palabras que hacen que mi deseo aumente y las ganas de volver a verte se hagan cada vez más presentes y urgentes en mi cuerpo… Mis ojos se cierran mientras inspiro profundo, y un suave suspiro de placer se escapa entre mis suaves labios…

De a poco la brisa se convierte en viento, las oscuras nubes se posicionan sobre toda la ciudad y entre ellas los relámpagos comienzan a aparecer. La creciente agresividad de la naturaleza que me rodea activa cada vez más mis ganas… Cómo quisiera que estuvieras acá y poder abrazarte! Comerte la boca a besos, ver tu mirada apasionada clavada en mis ojos bajo la llovizna que nos moja lentamente hasta empaparnos, percibir la necesidad de tu piel que reclama la mía, cómo tu aliento cada vez me da más y más vida, desvestirnos en un ritual casi sagrado que tiene como ofrenda toda nuestra avidez y cualidad de insaciables, atestiguar una vez más las erupciones del hermoso volcán que nace en cada uno de nuestros encuentros y al final terminar dormida plácidamente entre tus brazos…

Te espero mi amor, te espero… Te espero porque mi cuerpo no responde a nadie más, quiere entregarse sólo a vos, recibirte sólo a vos, saciarte sólo a vos, deleitarte sólo a vos… Sos el único que sabe revolucionarme hasta el delirio del éxtasis, llevarme al extremo, hacer estallar mi imaginación hacia todos lados a la vez…
Vení pronto, me hacés mucha falta, te extraño mucho mi amor…


Cristalitoconprobabilidaddelluvia